El conocimiento como proceso y los objetivos de investigación

La comprensión holística de la ciencia ha replanteado el conocimiento como un proceso permanente, más que como un único punto de llegada. En consecuencia, uno de los principios de la comprensión holística de la ciencia plantea que en este proceso el ser humano va alcanzando conocimientos que poseen cada vez mayores grados de complejidad, y esto se manifiesta, tanto en el trabajo de cada científico, como a nivel de la humanidad en general. Cada conocimiento, en un momento particular de una época, va dando lugar a otros conocimientos más complejos. Las descripciones que hace un científico en una época (por ejemplo, la identificación de planetas y estrellas, la clasificación de seres vivos, la caracterización de una cultura, la identificación de los componentes del ADN humano…) sirven de punto de partida a ellos mismos o a otros científicos para hacer comparaciones (la biología comparada, la sociología comparada…), y estos resultados contribuyen a lograr explicaciones para la creación de teorías,  pasa por las predicciones, las propuestas, las intervenciones, las verificaciones y las evaluaciones, y continúa nuevamente en otro nivel, de manera que el proceso podría visualizarse como un fractal.

Estos grados de complejidad del conocimiento están vinculados con los procesos cognitivos (Hurtado de Barrera, 2013), y se expresan a través de los verbos que se utilizan para la formulación de los objetivos. En general, son 10 niveles, y para cada nivel existe un verbo principal, y un conjunto de verbos asociados que se encuentran en ese mismo grado de complejidad. Los niveles de complejidad son: explorar, describir, analizar, comparar, explicar, predecir, proponer, modificar, confirmar y evaluar, ordenados desde el menos complejo al más complejo, y se muestran en el infograma 1.

Infograma 1. Grados de complejidad de los objetivos de investigación

A continuación, se describe lo que implica cada uno de estos grados de conocimiento:

• Explorar: Implica acercarse a una realidad totalmente desconocida o muy poco conocida, con mente abierta, para identificar aspectos claves, familiarizarse con una problemática o con un contexto y generar preguntas.
• Describir: Significa detectar características o atributos de un ser o de una situación para de los expresar cómo es, cómo se manifiesta, de qué manera aparece, cuantas veces parece, en quiénes aparece, con que intensidad aparece, o cómo cambia a lo largo de tiempo.
• Analizar: Implica llegar a una interpretación o significado nuevo a partir de la relación entre diferentes aspectos. No significa partir, fraccionar o dividir, sino trascender el sentido literal de algo para descubrir otros significados que no son evidentes. A veces implica buscar internamente, dentro del evento, otras pautas de relación que no son evidentes a la mirada ingenua. En un objetivo analítico, el análisis implica precisar la correspondencia entre el evento que se pretende analizar y un criterio de análisis, por lo tanto, para analizar requiere de uno varios criterios.
• Comparar: Se refiere a la búsqueda de diferencias y semejanzas entre dos o más seres, con respecto a uno o varios atributos. En este caso se necesita precisar el atributo para el cual se van a identificar las diferencias o las semejanzas.
• Explicar: Es el primer proceso en la jerarquía donde se trabajan relaciones causa-efecto, aunque no toda explicación es causal. Se buscan los por qués de algo, las causas que lo generan o los procesos que dan lugar a ese algo. La explicación requiere de inferencias y relaciones entre eventos.
• Predecir: Significa anticipar algo que no ha ocurrido, derivar consecuencias para prever lo que podría ocurrir a futuro, y generalmente se hace a partir de las explicaciones. La predicción requiere de procesos deductivos. La predicción se ocupa de los futuros probables.
• Proponer: Implica diseñar, crear, imaginar para derivar las acciones futuras que se necesitan realizar para lograr algo, o para generar algo que todavía no existe. Las propuestas se ocupan de los futuros deseables.
• Modificar: Requiere de la aplicación de algo, de la intervención de la persona para generar un cambio. Se refiere a la puesta en práctica de lo planificado y el seguimiento de esa puesta en práctica para detectar los cambios durante el proceso.
• Confirmar: Se refiere al proceso mediante el cual se verifica si una supuesta causa realmente está asociada a un determinado efecto, para lo cual se requiere hacer ciertos controles de las otras posibles causas a fin de descartarlas.
• Evaluar: Implica detectar si la intervención o la aplicación de algo generó el resultado esperado. Tiene que ver con la efectividad de las acciones y sus consecuencias. Después de evaluar inicia nuevamente explorar ero en otra escalera.

Es importante no confundir estos procesos. Por ejemplo, es frecuente ver confusiones entre describir, analizar y evaluar. Algunas personas utilizan el verbo evaluar para referirse a una descripción, pero en la descripción no ha habido ninguna intervención, sólo se busca saber que hay, mientras que en la evaluación se busca la efectividad de una intervención, es decir, si el cambio que se buscaba se logró o no. 

También se suele confundir analizar con evaluar: en el análisis se puede contrastar una situación existente con un deber ser, o con otro criterio, y no requiere de una intervención o de una aplicación de algo, mientras que en la evaluación se realizan acciones y se valora su efecto.

En conclusión, la comprensión de los grados del conocer es fundamental para la formulación correcta de los objetivos de investigación en cualquier estudio.